Angelici: "Ningún dirigente puede estar 4 años sin ser campeón"

Feliz con lo económico, Angelici reconoce que falta el resultado deportivo: “Hay que ganar el título y jugar la Libertadores”. -¿Cómo evaluás tu gestión a casi dos años de haber asumido? -Creo que en los números cumplimos y con creces. Somos superavitarios sin vender. La idea es aprovechar que Boca sigue siendo la marca Nº 1 de la Argentina y somos exitosos en eso, por los contratos que conseguimos, por los que estaban firmados y renegociamos como el de Nike y por aquéllos que cambiamos para bien, como el caso de Coca, que se sentía intocable y fue reemplazado por Pepsi, que nos da prácticamente el doble. -¿Lo más negativo es no poder erradicar a los violentos de la cancha? -Sin dudas. Es la mayor preocupación que tengo día a día porque soy un convencido de que no depende de mí erradicarlos. No puedo y no tengo las herramientas y tampoco está la decisión política de solucionarlo. -¿Por qué no toman la decisión? -Es antipopular endurecer las leyes y hacerlas cumplir y enfrentar a los 80, 90 ó 100 violentos de cada barra, que son los que generan los problemas. Muchas de estas acciones rozan las garantías constitucionales. Pero si no te ponés firme, esto no se termina. -Antipopular es que por 80 paguen 4.500, como le va a pasar a Boca la próxima vez de local. -Esa es la discusión que yo planteé. El desafío es saber quién tiró la bomba casi encima de Caranta. Nosotros nos vamos a hacer responsables del tema del cartel más allá de que lo tengamos concesionado. El control del contenido lo tenemos: eran cuatro tapas de la revista Sólo Boca y una de las tapas era ésa. Ahora, la inoportunidad de que un empleado de la empresa ponche eso en ese momento porque le salta el hincha... -Eso más los fantasmas y los fuegos... Parecía armado por Boca. -La gente cree que nosotros estuvimos de acuerdo y pagamos los fuegos artificiales. Y yo puedo garantizar que no. Pero lo grave fue lo de Caranta. La Secretaría cree que partió de la tercera bandeja y el fiscal tiene los videos. Aunque esto plantea otra polémica: ¿para qué pago Policía? No puedo estar en todas las puertas. Y si clausuran, me dejan como un rehén porque entonces ellos se hacen fuertes con eso: me pueden amenazar con tirar algo para que suspendan el estadio si no les doy lo que pidan. -¿Con el fútbol estás conforme? -Armamos un buen plantel. Pero el equipo juega algunos partidos bien y en otros deja dudas. -¿Hay responsabilidad del técnico? -Siempre digo que los que juegan son los futbolistas. -¿Están preocupados por los lesionados? -Estamos ocupados. Tuvimos una reunión con el técnico y con los médicos y me mostraron los estudios y los análisis que hicieron. No es una sola causa. Ellos revisaron los ejercicios físicos pero puede ser el cansancio, la alimentación, el estrés, cuestiones genéticas... Y según la estadística no está tan lejos de lo que les pasó a los otros. -Si no es campeón, ¿Bianchi puede no seguir? -No, él va a seguir. Bianchi ganó muchos títulos con Boca y eso genera agradecimento y reconocimiento. La gente no se olvida. Nunca lo hablé con él, pero la única chance de que no siguiera era si este semestre se daba igual que el pasado. En un caso así, cualquiera se iría, por más que tenga el 90% del apoyo del socio o el 100% del apoyo de la Comisión Directiva. -¿Vos vas a seguir después de 2015? -No lo estoy analizando. Tengo dos años más de gestión por delante y quiero dejarle algo al club. Ahora vamos a avanzar con la ciudad deportiva porque lo del estadio es difícil: no tenemos los terrenos y con el cepo cambiario no es fácil atraer inversores. -Fuiste a Europa a ver ciudades deportivas. ¿Cómo te trataron? -Muy bien, Boca es el único club argentino reconocido en el mundo, en buena parte por las copas internacionales que ganó en la década pasada. Florentino Pérez llamó a toda la prensa en el entretiempo para entregarme la camiseta del Real, el presidente del Tottenham vino a comer con nosotros... -¿No está mal alejarse? Este año desecharon Marruecos y España. -Tenemos poco tiempo. Lo ideal sería hacer pretemporada en Europa y se podría hacer en conjunto con River. O sea: vender el Boca-River alrededor del mundo, o jugar un cuadrangular con equipos de afuera. Cuando estuve en Londres, hablé con la gente del Arsenal. -¿Qué te sorprendió de las instalaciones? -Algo muy interesante que hacen es marcar la diferencia entre la Novena y la Primera. El Real Madrid, ayudado por el terreno, lo hace escalonando las canchas: la de la Novena está abajo y la de la Primera, arriba de todo. El chico mira y tiene que llegar a la cima. En Tottenham, la diferencia la marcan los vestuarios, más lujosos conforme se avanza. -¿Sin un resultado deportivo se menosprecia la gestión? -Sin dudas. El socio reconoce los cambios, pero salir campeón hace que todo brille mucho más. La gente no va al Obelisco a festejar el superávit del balance. Ningún dirigente pasa cuatro años sin ganar nada. Boca no puede estar cuatro años sin un título. -En junio se termina el contrato de Riquelme. ¿Hablaron de renovar? -No. Esperaremos al 30 de junio y nos sentaremos a hablar. Hoy, todos tenemos que pensar en que Boca debe ser campeón y jugar la Libertadores. Las condiciones de Riquelme son indiscutibles. Si el año que viene está bien físicamente y con ganas de seguir, muy probablemente se le renovará. Si vemos que no, nosotros tenemos que privilegiar el club por arriba de los jugadores.