A menos de un año para que finalice su contrato con Boca Juniors, el enganche no descarta continuar vistiendo la camiseta Xeneize. "Creo que puedo jugar un poco más", aseguró.
En un extensa charla con el diario Clarín, Juan Román Riquelme habló de su presente, de como afrontará Boca Juniors esta parte del campeonato e incluso se refirió a si continuará vistiendo la camiseta azul y oro.
El enganche expresó la influencia que tuvo el fútbol en su vida:
"Es parte de mi vida. Es el juego que elegí de chiquito, el que más me divirtió. Y hoy, de grande, lo sigo disfrutando".
"Yo no podía ir al colegio y entrenar por la tarde a Argentinos Juniors porque no llegaba al Bajo Flores. Entonces, hablé con mi mamá y mi papá para que me dejaran intentar ser futbolista. Les prometí que no iba a dejar de entrenarme; que iba a jugar al fútbol de verdad. Tuve la suerte de que decidí bien y las cosas salieran bien. Igualmente, de chiquito sentía que iba a jugar a la pelota".
Agregó que ve mucho fútbol por televisión, tanto de Argentina como del exterior:
"El fútbol me gusta mucho. Miro todos los partidos que hay. De Primera, del Ascenso, de Europa. Siempre encuentro algún jugador que me gusta como juega. Siento la obligación de sentarme a mirar cómo lo hace. Soy jugador de fútbol. Creo que siempre se puede aprender. Hoy se aprende mucho mirando. Más en nuestro fútbol en el que hay mucho nervio y solamente sirve ganar".
"Me entretiene ver un partido de fútbol, por más que no sean dos equipos conocidos. Hay alguno que hace algo bueno. No necesito que haya 90 ó 95 minutos de fútbol intenso. Quizá alguno hace un caño y con eso me quedo".
Opinó sobre la generación de jovenes que juegan más al fútbol en los videojuegos que en una cancha:
Y"o tengo a mi hijo que se enoja porque no sé jugar a la Play y tiene que invitar a un amigo para jugar. Están mucho con el celular también, pero a los chicos les gusta. Yo lo que veo en el fútbol es que se vive con mucho nerviosismo en nuestro país. Y, por la presión, los chicos no pueden tener la tranquilidad para crecer".
Explicó porque le parece tan importante la tenencia de pelota en este deporte:
"Será también por la posición que tengo, pero para mí el fútbol es el pase, el control y elegir bien. Como hace Aimar. Hay jugadores que no necesitan ir tan rápido como otros, porque no están tan preparados en un gimnasio como otros, pero la pelota la tienen siempre ellos".
"Correr, corre cualquiera. Hoy una persona se pone a entrenar todos los días y corre los 42 kilómetros como los que se hicieron el otro día. A veces escucho en la tribuna '¡corré más!' y yo pienso que eso lo hace cualquiera. Te preparás, corrés todos los días y terminás en una maratón. Mucha gente de 40 o 50 años hace eso. Correr, corre cualquiera, pero jugar al fútbol es más complicado. Somos los únicos que jugamos con los pies, para empezar; el resto juegan todos con las manos. Somos afortunados, elegidos y vivimos de algo muy lindo".
Comentó las diferentes exigencias que tiene Boca respecto a otros equipos como Newell's Old Boys:
"Nosotros vivimos realidades diferentes. Newell's ganó el torneo pasado jugando bien, encontró tranquilidad y la gente es agradecida. Nosotros sabemos que en Boca no es así. Acá ganás, pasan dos partidos y la gente exige cada vez más. A los más chicos hay que acostumbrarlos a eso, que sepan que juegan en el club más grande del país".
También manifestó que los equipos del país no son regulares:
"En el fútbol argentino falta regularidad. El torneo es parejo porque todos tenemos un partido bueno y otro malo. Es parejo porque ninguno juega bien siempre, aunque después el resultado tapa muchas cosas. Los únicos que juegan una maravilla son el Barcelona y el Bayern Munich. Acá Newell's y Godoy Cruz intentan jugar bien. Vélez también, aunque ahora no encuentran estabilidad. Y Arsenal es muy regular. Nosotros estamos intentando encontrarnos. De local estamos bien, pero de visitantes bajamos mucho".
Afirmó que puede jugar junto a Fernando Gago tranquilamente:
"Dicen eso porque quieren armar un poco de discusión. Si hablan de dos arqueros jugando juntos me parece que la gente se va a dar cuenta, entonces nos nombran a nosotros. Fernando juega en una posición y yo en otra. No tenemos nada que ver. ¡¿Cómo no vamos a poder jugar juntos?!".
Agradeció el cariño que le tiene el hincha de Boca:
"La gente me da demasiado. Yo soñaba de chiquito, como seguro soñaban ellos, con jugar un partido en La Bombonera, que es la cancha más linda de todas. Hoy resulta que soy el que más partidos jugó ahí. Y sé que el día que no juegue más, hay una estatua en el club por la que alguno va a preguntar: '¡¿Quién fue este tipo?¡'".
Fue consultado sobre Carlos Bianchi, quien tiempo atrás manifestó que es el mejor jugador de la historia del club:
"Lo había dicho cuando era manager, cuando estaba en su casa sin dirigir y ahora de nuevo. No sé si lo dice porque me quiere demasiado o si realmente lo siente así. Es increíble. Él me enseñó mucho, le voy a estar siempre agradecido y tenerlo como técnico en el final de mi carrera es una maravilla".
"Lo veo bien mucho mejor que cuando lo conocí hace 15 años. Disfrutando y riéndose mucho más que antes. Ojalá lo pueda ayudar a que le vayan bien las cosas".
Además, piensa que el técnico sigue trabajando de la misma manera que siempre y destacó sus virtudes:
"Lo que pasa es que primero nosotros, después los periodistas y también los hinchas tienen que entender que otro equipo como aquel en el que arrancó no se repetirá. Un arquero como Córdoba, más Samuel, Ibarra, Basualdo, Delgado, Palermo y Guillermo no se juntan más. ¿En dónde vas a encontrar un Serna como aquel? Es imposible encontrar once jugadores así. Es como Barcelona: no habrá otra vez once como tienen ahora. Bueno, el primer Boca de Bianchi no se va a repetir jamás. Y un técnico como él tampoco se va a repetir en la historia. Por eso le exigen tanto".
"A él le gusta enseñarles a los chicos lo que es esto y lo que es ser responsables. Bianchi no sólo te enseña a ser futbolista, también a ser persona. Eso no lo tienen todos. Si los chicos son inteligentes van a aprender un montón de él".
Por otra parte piensa que la prensa lo ataca mucho por no conceder entrevistas:
"Él tiene las cosas claras. Sabe muy bien lo que tiene que hacer y no se preocupa por lo que dicen".
"Le faltan el respeto porque nunca contesta. Al que no contesta siempre lo buscan un poco más".
"Estamos acostumbrados. Pasa que no somos ni héroes ni nada: sólo somos jugadores de fútbol. Sabemos de dónde vienen las críticas y las intenciones que tienen".
Por otra parte, charló de su futuro:
"Tengo un contrato firmado hasta el 30 de junio y soy una persona a la que no le cuesta tomar decisiones. La verdad es que se me hace muy fácil. Si a partir del semestre que viene me sigo sintiendo bien como hasta ahora y si creo que puedo ayudar a mi equipo para lograr cosas importantes, voy a seguir jugando. Si no me pasa eso, no me voy a tomar las cosas con mucho problema. Si siento que no puedo jugar más, le daré la mano al técnico, al presidente, le mandaré un beso grande de agradecimiento a los hinchas y listo".
"Todavía tengo nafta en el tanque para seguir jugando. Entreno con chicos de 20 años todos los días que me hacen correr un montón. Creo que puedo jugar un poco más todavía. Y tengo ganas".
Para cerrar la extensa entrevista, cuenta como vive las obligaciones que hoy tiene como experimentado del plantel:
"Tengo más responsabilidades por el lugar que ocupo. Siento que tengo que ayudar a mis compañeros en todo y cumplir adentro de la cancha, pero disfruto al máximo cada momento que paso en el club, aunque lo diga poco".
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